Lo puedes colocar dobladito en una esquina del sofá o en el sillón de lectura. Lo puedes colocar a capas formando un abanico de color. En el estante de la mesa pequeña de salón, dando un punto de calor, y a mano para usar cuando más te apetezca. En el reposabrazos del sillón, un toque de color con utilidad básica.

Colócalo con un estilo desenfadado y un punto curioso donde uno de sus picos toque la alfombra. Esta tendencia es para los más atrevidos. Tú eliges cómo te gustaría que decorase tu hogar. Fabricado en diferentes tonos y tejidos, ideales para distintas épocas del año.